Por cierto, más allá de opinar del conflicto de Palestina e Israel, los exhorto a contemplar La obra de arte de Walter Zuluaga, El Cumplimiento de la Profecía, representa un poderoso llamado a la unidad y la comprensión en un mundo dividido por diferencias religiosas y conflictos históricos. Al retratar las tres religiones monoteístas en un diálogo placentero, Zuluaga nos recuerda que, a pesar de las diferencias teológicas y culturales, todas estas religiones comparten raíces comunes y un vínculo en la figura de Abraham.

La conexión con Abraham simboliza el origen común de estas religiones y la idea de un solo Dios. Este recordatorio es esencial en un momento en que a menudo vemos las noticias llenas de tensiones y conflictos en la región de Israel y Gaza, donde estas mismas religiones a veces parecen estar en conflicto perpetuo.

En mi comentario, quiero resaltar la lamentable realidad de cómo la política, el territorio y los poderes han oscurecido el propósito fundamental de estas religiones: la búsqueda de la verdad, la justicia y la paz. en última instancia, todas las creencias religiosas deberían alentar la coexistencia pacífica y el respeto mutuo.

¡Ahora te invito a que compartas esta columna! Con el ánimo que aborde estos puntos de vista, puesto que podría contribuir a la conversación global sobre la importancia de dejar de lado las diferencias superficiales y trabajar hacia un mundo donde la tolerancia y el entendimiento sean la norma.

La obra de Walter Zuluaga y mi interpretación personal ofrecen una visión inspiradora de un futuro en el que la humanidad se una en su diversidad y encuentre un terreno común en la búsqueda de un mundo más armonioso.

John Gómez
Director + Arte + Ciudad