El último artista que pintó la Biblia, Marc Chagall
Marc Chagall tenía 24 años cuando París le cambió la vida. La capital francesa era en 1911 el epicentro de las vanguardias artísticas y el joven pintor ruso de origen judío, aún en formación, llegó allí procedente de la pequeña ciudad de Vitebsk y se quedó tres años en los que absorbió todas las influencias que pudo sin adherirse a ninguna corriente en particular. Fue una etapa en la que experimentó con los colores, las formas abstractas y geométricas, el movimiento y sus propias ensoñaciones, configurando la base de un estilo ecléctico, colorista e imaginativo que desarrolló a lo largo de su longeva y exitosa carrera artística